A veces nuestros hijos e hijas tienen que emitir quejas, disgustos o críticas y no saben expresarlo adecuadamente, es decir, con asertividad. Y nosotros, como adultos, tenemos la responsabilidad de guiarles y enseñarles a hacerlo pero, ¿cómo lo hacemos? Hoy te explicamos qué es la técnica del sandwich y cómo aplicarla.
Que es la asertividad
Lo primero es definir la asertividad. La asertividad es la habilidad de expresar pensamientos, sentimientos y necesidades de manera clara y respetuosa, sin agredir ni someterse a los demás.
En la infancia, fomentar la asertividad es crucial, ya que ayuda a los niños a desarrollar confianza en sí mismos y a establecer relaciones saludables. Al aprender a comunicar sus emociones y a defender sus derechos, los niños se vuelven más capaces de manejar conflictos y de decir "no" cuando es necesario. En otras palabras, la asertividad es una expresión de una sana autoestima.
Esto no solo promueve su bienestar emocional, sino que también les enseña a respetar las opiniones y sentimientos de los demás, creando un ambiente de comunicación positiva.
Como aplicar La tecnica del sandwich
Esta técnica es útil principalmente a la hora de expresar críticas hacia los demás de una manera empática. Además, nos ayuda a hacer visible algo invisible como es la asertividad. Representado por un sandwich o bocadillo, nos refleja las diferentes partes del proceso.
PRIMERA PARTE: Expresar un elogio hacia la otra persona
Comenzaremos la comunicación expresando un elogio o un mensaje positivo hacia la otra persona.
Por ejemplo: "Me gusta mucho jugar contigo en el parque".
SEGUNDA PARTE: Expresar la crítica o el desagrado
La siguiente parte (representada con la primera capa de relleno) es la expresión del mensaje más "negativo", aquella crítica que queremos emitir. Es importante que ese mensaje se emita a través del yo, es decir, que hablemos de cómo nos ha hecho sentir a nosotros, sin caer en descalificaciones o incluso insultos hacia la otra persona.
Siguiendo con nuestro ejemplo: "pero cuando no me dejas jugar con tus juguetes, me siento muy mal".
TERCERA PARTE: aportar soluciones o alternativas
El siguiente paso es, si se puede, dar algunas alternativas o posibles soluciones que resolverían el conflicto. Esto hace ver que estamos comprometidos con el cambio e interesados en solucionar el problema.
En nuestro ejemplo: "Me gustaría que pudiéramos compartir los juguetes".
CUARTA PARTE: Volver a expresar una actitud positiva hacia la otra persona
Para finalizar la comunicación, es interesante volver a expresar un mensaje positivo hacia la otra persona, que rebaje el tono y que haga ver que, aunque estemos molestos por un comportamiento concreto, seguimos apreciándole.
En el ejemplo: "¡Eres muy buen amigo y me encanta poder pasar tiempo contigo!"
Si necesitas ayuda con el desarrollo de la asertividad en tus hijos e hijas, estaremos encantadas de acompañarte en el proceso.
Psique&Meraki - Gabinete Pedagógico
C/Blasco de Garay nº75 - Madrid
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